Cuando llegue el momento de crear un personaje en World of Warcraft, te encontrarás con que tendrás que tomar varias decisiones. Hay diez razas y nueve clases disponibles, pero la más importante relacionada con la creación de un personaje es la facción por la que quieres luchar. Puedes unirte a la Horda o a la Alianza, y tu elección determina gran parte de lo que puedes y no puedes lograr en el mundo.

Sólo puedes formar grupos y hablar con jugadores de tu misma facción. Lo mismo ocurre a la hora de ver y trabar amistad con jugadores de tu facción cuando uses los comandos sociales del juego.

La intención de esto es hacerte sentir parte de un equipo enorme a la vez que la otra facción se convierte en enemigo, o en el mejor de los casos, rival. Por lo tanto, si quieres jugar con tus amigos, tendréis que estar en la misma facción. Otros contenidos, como las zonas que puedes visitar y las misiones que puedes completar, también se organizan por facción. Algunas misiones solo las pueden completar los jugadores de la Horda y otras solo los de la Alianza. Algunas zonas ofrecen ciudades y PNJ interactivos para una facción, pero son totalmente hostiles con la otra.

La Horda está formada por elfos de la sangre (sólo para The Burning Crusade), orco, tauren, trols y no-muertos, mientras que la Alianza la forman draenei (sólo para The Burning Crusade), enanos, gnomos, humanos y elfos de la noche. Todas las clases están representadas en ambos bandos.